
Este mismo día pero más tarde viví una experiencia muy grata. Niños y jóvenes con capacidades diferentes se encontraron para celebrar el día de la discapacidad y entre tantos docentes y alumnos se encontraba un grupo de payasos que para mi sorpresa era un grupo de adolescentes que llenaron el lugar de alegría e hicieron desaparecer toda diferencia existente entre los presentes.Ver que ellas se mezclaban tan natural con los chicos fue algo muy especial. Estas jóvenes que cualquiera pensaría que estarían comprado ropa, paseando por el centro o disfrutando de un viernes en un parque o plaza, no! ellas estaban brindando mucha alegría y por eso se merecen mi respeto totalmente!!!!!!
Estos actos hay que darlos a conocer mas seguidos porque en la generalidad cae gente que no lo merece y creo que es un error muy nuestro, muy argentino el de generalizar, etiquetamos muy rápido a la gente. Me parece que nos da fiaca ponernos a separar y distinguir bien a la gente.